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¿Por qué “Espacio Schmidheiny: la verdad sostenible”?

Stephan Schmidheiny es un empresario y filántropo cuyas ideas visionarias contribuyeron al avance de la agenda mundial del desarrollo sostenible desde el año 1976, cuando a los 29 años asumió la dirección de Eternit Suiza, la empresa familiar.

Un grupo de organizaciones, algunas vinculadas con Stephan Schmidheiny y otras creadas por él a lo largo de su trayectoria, hemos considerado oportuno crear el “Espacio Schmidheiny: la verdad sostenible”, para ponerlo a disposición de los interesados en conocer su obra, así como para facilitar el acceso a la información sobre el proceso judicial en el que ha estado involucrado.

Con esta narrativa pública se intenta contextualizar la vida empresarial y filantrópica del pionero en la eliminación del uso de asbesto en los productos fabricados por su empresa, un precursor en la inversión de riesgo, un innovador en filantropía e inversión social y el inspirador de nuestras organizaciones.

En su juventud fue pionero de la eliminación del uso de asbesto en los procesos productivos…

…cuando, a meses de asumir la conducción de Eternit, reunió a los gerentes para impulsarlos a tomar medidas que redujeran los riesgos de manipulación y transporte de ese mineral, invirtió millones de dólares en adecuar las instalaciones industriales para hacerlas más seguras, desarrolló programas de cuidado del medio ambiente y desde 1981 financió las investigaciones que permitieron encontrar un material sustituto del asbesto en la fabricación de láminas de fibro-cemento.

En 1984, cuando ni los gobiernos ni la propia industria habían tomado medidas de seguridad sobre el asbesto, la firma Eternit, bajo el liderazgo de Schmidheiny, reemplazó el asbesto en un importante porcentaje de su producción. Intentó convencer a sus colegas de otras empresas para que el resto de las industrias siguiera el mismo camino, pero no tuvo éxito. Las inversiones que exigieron estos procesos tornaron a algunas de las fábricas inviables por lo que fueron cerradas. En 1989, decidió vender su participación accionaria en Eternit y se retiró de la industria.

Durante el decenio comenzado en 1980, fue un precursor en las inversiones de riesgo. Diversificó sus negocios a partir de retos como la compra de empresas que requerían una profunda adecuación para poder seguir operando, o la inversión en sectores en crisis, como la relojería de Suiza que, en ese entonces, estaba fuertemente amenazada por la relojería japonesa. Así, Schmidheiny reestructuró su patrimonio con la reconversión de empresas e industrias en crisis que, vistas desde los estándares de la inversión tradicional, habrían  quebrado o desaparecido.

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En su madurez, durante la década del ’90 y parte de la década del 2000, consolidó su perfil de referente del desarrollo sostenible a nivel global, colaborando en la organización de la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro en el año 1992, e impulsando la creación del Consejo Mundial Empresario para el Desarrollo Sustentable (WBCSD, según sus siglas en inglés). Al mismo tiempo, eligió América Latina para profundizar una estrategia innovadora de inversión social, fundando Avina para promover el liderazgo social y empresario en torno a la sustentabilidad y la inclusión, y Fundes, para fortalecer las capacidades de las pequeñas y medianas empresas como factor de desarrollo y generación de empleo.

Para que su obra perdurara cuando decidiera retirarse de la vida activa, creó el fideicomiso VIVA TRUST, conformado por inversiones y acciones de empresas productivas latinoamericanas. Parte de las utilidades que generan se destinan a actividades filantrópicas y a la financiación de las iniciativas y de las organizaciones que hoy siguen generando transformaciones que trascienden lo que han sido sus aportes personales.

“Stephan Schmidheiny es una persona que enfrentó un problema y deja como legado numerosas soluciones”.

Debido a que, por su característica discreción, Schmidheiny ha cultivado un bajo perfil personal, no se ha conocido lo suficiente acerca de su persona y del alcance de su trayectoria empresarial y filantrópica. Al no divulgarse apropiadamente su obra y los impactos que ha producido, ciertos relatos sobre todo los vinculados con el juicio en Italia por el tema del asbesto han buscado distorsionar su trayectoria y el valor de sus aportes a la sociedad para afectar su imagen pública en formas que no hacen justicia a la realidad de lo que han sido su persona  y sus obras.

Desde “Espacio Schmidheiny: la verdad sostenible”, las organizaciones promotoras de este sitio esperamos aportar información relevante para que la obra y la trayectoria de Schmidheiny alcancen la difusión y la dimensión justas y para que los debates que puedan generar los asuntos  vinculados con el asbesto y el juicio en Italia, puedan darse en un escenario de discusión racional y de generación de propuestas constructivas.

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